domingo, 23 de agosto de 2009

carta a alondra

Hija,

Te escribe tu papa que te extraña cada día. Tu sabes que por ahora no puedo estar contigo, princesita. Pero tu papi, que está lejos tuyo derrama una lágrima por ti cada día, y eso quiere decir que siempre me acuerdo de ti, de lo lindo de tu sonrisa y de lo bonito que es conversar con una niña tan inteligente como tu.

Cada vez que me preguntas por el teléfono cuándo estaré contigo, me dan ganas de decirte que nos vamos a ver muy pronto hijita, que nos veremos mañana y que te llevaré a ver los animalitos en la granja que tanto te gustan. Pero me voy a demorar un poco, esa es la verdad. Pero ya pronto vamos a estar juntos de nuevo, y seremos un papá con su hijita paseando por todos los lugares, jugando a las escondidas como siempre jugábamos y haciendo la tarea juntos. Sólo tenemos que tener paciencia, y verás que el tiempo se pasa rápido, mira que ya tienes cuatro años y parece como si fuera ayer cuando recién naciste y eras tan chiquita que me daba miedo cargarte. Pero ahora que ya estás grande y entiendes todo lo que te dice tu papá veo que has crecido mucho, y que cada día eres una personita inteligente y linda.

Hazle caso a tu mamita, yo sé que eres una niña obediente con ella. Quiero que sepas bien que nadie más te puede mandar y que tú no estas obligada a hacer nada que no quieras, salvo lo que te diga mamá, espero que entiendas esto. No te olvides de tu papi, hazme una cartita, con un dibujo, para que me acompañe aquí donde estoy ahora, y estar siempre juntos.

Cuídate mucho hija, y recuerda que tienes que ser buena, comparte tus cosas con tus amigos, con los niños pobres que no tienen lo que nosotros sí tenemos, y haz que la gente te quiera por lo que eres, una niña buena y hermosa. Te quiero muchísimo, te extraño y estás en cada momento dentro de mi corazón.

Con amor,

Papá.

(Bogotá, noviembre del 2008)

No hay comentarios: